Podríamos estar hechos de materia que no se originó en la Vía Láctea
¿Alguna vez te has preguntado de qué estás hecho? ¿Es la Tierra, y por extensión la humanidad, construida de materia que se recogió aquí después del big bang, o nuestros orígenes son mucho más complicados? Nuestro pequeño sistema solar escondido entre los enormes brazos de la galaxia de la Vía Láctea podría no tener los orígenes que los científicos han asumido desde hace mucho tiempo, y nuevas investigaciones sugieren que una cantidad incalculable de materia en nuestra galaxia doméstica podría no haber originado aquí en absoluto.
La investigación, llevada a cabo por los astrofísicos de la Universidad Northwestern y publicada en un nuevo artículo, reveló que las explosiones masivas de estrellas moribundas en otras galaxias podrían ser responsables de enviar material a través del espacio que eventualmente fue atraído por la Vía Láctea.
El proceso se llama transferencia intergaláctica, y los científicos descubrieron por primera vez que existe gracias a las simulaciones avanzadas de supercomputadoras de estrellas moribundas. Los datos revelaron que la notable cantidad de materia lanzada durante una supernova podría ser llevada entre galaxias, permitiendo que nuevas estrellas y planetas se formaran en una galaxia usando materia expulsada de otra.
La potencial propagación de la materia extragaláctica es interesante por varias razones, entre ellas la posibilidad de que la Vía Láctea, nuestro Sistema Solar e incluso nuestro propio planeta estuviera construido en parte con la materia que se reunió a muchos años luz de distancia. La investigación muestra que este asunto podría viajar durante miles de millones de años antes de ser arrastrado por otra galaxia, por lo que no se sabe hasta qué punto el asunto que compone usted y yo viajamos - o hasta dónde viajará en un futuro lejano, mucho después nos habremos ido y nuestra estrella sufre su propia dramática transformación final.
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